Fragmento de la semana
Me hundí hasta las rodillas mientras la adrenalina
se desvaneció y mis músculos empezaron a temblar, dejándome débil y muy cerca
de hiperventilar. Yo podía manejar duendes y villanos y caballos malvados
comedores de carne, ¿Pero una maldita araña gigante? Ahí es donde dibujaba mi
línea límite.
Meghan Chase-The iron daughter
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